Garantizar la seguridad necesaria al consumidor y evitar retiradas de productos no implica únicamente un envasado correcto y sellado de forma adecuada; cada producto debe ser marcado al principio del proceso con códigos de partida y fechas de vencimiento. Dicha acción es necesaria tanto para el control de calidad como de la trazabilidad.
En este sentido, gracias al reconocimiento óptico de caracteres es posible el control confiable de procesos para ayudar a los fabricantes a cumplir no solo con los requisitos de etiquetado, sino también garantizar la seguridad del consumidor.
Sin resignar productividad ni velocidad, los sistemas de visión pueden detectar la presencia o ausencia de códigos de lote/fecha, verificando además que la cadena de números y letras sea la correcta.
